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Keyla mi jarocha favorita

Es de san nicolas NL

>>3697
Tiene cara de que le gusta devorar vergas, préstame a esta pendeja y te la regreso rellena de leche por todos lados para que se alimente como debe

Si gustan les paso dónde seguirla

que no muera

>>4154
Más, por favor.

>>1229
>>1219
>>1206
Perdón negros, he estado ocupado estos días, pero aquí les traigo la mejor parte.
Ése día en la mañana después de ver la televisión desnudo entre las cobijas (no hay mejor sensación que ésa) fui a bañarme, pero pasó algo extraño mientras el agua me caía, empecé a sentirme demasiado agotado, los ojos me pesaban, suspiraba mucho, me sentía como sedado y el agua caliente no ayudaba, al terminar volví a la televisión y terminé dormido, s me levanta para ir a comer a la mesa y nota mi fatiga. Una vez en la mesa empezó a decirme que lo había hecho muy rico, también que lo de nosotros quedaba entre los dos, nota otra vez mi fatiga
>Le voy a preparar algo bueno pa' que se recupere mijo

Llevaba una camisa escotada color rosa intenso lo cual le hizo más fácil sacarse los senos en frente de mí, me sorprendí ya que aun no me acostumbraba al cuerpo desnudo de una mujer, se acercó y colocó uno se sus senos sobre mi mejilla y empezó a masajearlo por arriba, lo recorría con las yemas de sus dedos, lo agarraba con ambas manos y pellizcaba sus pezones
>Ahí quietico mijo

Al cabo de unos cinco minutos empecé a sentir humedad y calor en mi mejilla, creí que era sudor al principio pero dejé de hacerlo cuando una gota se deslizó por mi cuello, retiró su seno de mi mejilla, tomó un poco del café que aun no probaba y tapó la parte de arriba del vaso con su grande bulto que chorreaba unas pocas gotas de leche, lo hizo completamente, lo apretó contra su pecho, lo sacó y empezó a exprimir su ubre en mi taza, así estuvo un rato mientras me veía con una expresión bastante neutra pero un poco sonriente, desafortunadamente no le salió mucha y solo alcanzó para cambiar a penas un poco la tonalidad del café, la diferencia a penas se sentía a excepción de unos grumos amarillentos que tenían un sabor demasiado dulce y hostigante, el morbo me consumió y me bebí todo el café
>¿Le sirvo más?
...
>Bueno pues, páseme el vaso

Sirvió más café y repitió el proceso pero esta vez empezó a masturbarse, después de un rato se quitó la falda larga que traía, dejó el café en la mesa y se sentó, yo fui al sofá que estaba a un costado del comedor, sentía como una adrenalina tirada a ansiedad que hizo que tuviese una erección, me saqué la verga y empecé a masturbarme mientras la veía haciendome café con leche, lo hice desesperadamente y paraba de vez en cuando, la expresión de s era como de un dolor placentero y eso alimentaba mi sed, se masajeaba un seno con una mano y se metía los dedos con la otra, poco a poco podía notar la aparición de una capa cristalina en ambas de las falanges de sus manos, torpemente se acomodó para añadirle de su leche al café que estaba en la mesa con un margen de error considerable, la mesa de madera con superficie de vidrio quedó como el cielo estrellado, pero las estrellas eran pepitas de lactancia que cada vez se hacía más cremosa, dejó empapado el vaso mientras aumentaba la velocidad con la que frotaba su vagina, el culo le vibró dos o tres veces y paró, con una mano me trajo el café con leche y con la otra su leche vaginal, me metió los dedos a la boca y me hizo beber el café, todo mientras seguía jadeante masturbándome, cuando ya iba a eyacular se arrodilló frente a mi y vio las últimas gotas de semen que pude producir, ya no había nada; con una mano movió mi verga hacía su boca, la examinó un poco y la uso como lápiz labial, luego que ponerle su brillo en los labios fue al baño por papel y limpió todo, ése día me bañé dos veces.

Blumpo